El error silencioso que frena el crecimiento de muchos hoteles: no tener claro su Core Business
En la industria hotelera, donde los algoritmos cambian, las plataformas cobran cada vez más comisión y los márgenes se ajustan al límite, hay algo que muchos hoteleros siguen pasando por alto: no tener claro cuál es el corazón de su negocio.
Muchos creen que su problema es la ocupación o la visibilidad, pero el verdadero cuello de botella está antes: en la falta de claridad sobre su estructura, sus costos y su propuesta central de valor. En otras palabras, no saber cuál es su Core Business.
El problema: cuando todo parece importante, nada lo es
En el día a día de un hotel, hay mil cosas por atender: reservas, mantenimiento, huéspedes, proveedores, personal… y en ese caos operativo, es muy fácil perder de vista el foco.
Sin un Core Business definido, el hotel empieza a operar en modo automático:
- Se establecen precios “al ojo”.
- Se copian estrategias de la competencia.
- Se invierte en publicidad sin medir el retorno.
- Se hacen descuentos para llenar habitaciones, sin saber si realmente se gana algo.
El resultado: un negocio que se mueve, pero no crece.
Amplificación: las consecuencias de no definir el Core Business
Cuando un hotel no tiene claro qué lo diferencia ni cómo genera rentabilidad real, cada decisión se convierte en un riesgo.
No hay un norte para definir prioridades, ni una base sólida para tomar decisiones estratégicas.
Esto se traduce en problemas visibles:
- Estrategias de marketing que no conectan.
- Falta de coherencia en la experiencia del huésped.
- Dependencia excesiva de plataformas externas.
- Dificultad para proyectar crecimiento o invertir con seguridad.
Y en el fondo, el negocio pierde su identidad.
La solución: volver al centro
Definir el Core Business no es hacer un ejercicio teórico, es volver al origen del negocio.
Implica responder preguntas simples, pero fundamentales:
- ¿Qué vendés realmente? ¿Una habitación o una experiencia?
- ¿Quién es tu cliente ideal?
- ¿Cuál es la promesa que hacés cada vez que alguien te elige?
- ¿Qué parte de tu operación genera mayor valor y rentabilidad?
Cuando un hotel logra responder con claridad esas preguntas, puede alinear todo lo demás: precios, comunicación, personal, inversión y crecimiento.
